Hace muchos años aprendí que ser generoso con quien decide puede repercutirte grandes beneficios. Esto es algo que ya sabían los americanos mucho antes que nosotros o ¿acaso no habéis visto esas secuencias de películas donde aparecen los ejecutivos en grandes cenas de negocios cerrando contratos millonarios? Ellos no se reúnen en un despacho, ni en una sala de conferencias, ellos cenan en restaurantes caros y luego se toman tres copas para hacer más “distendida” la reunión.
Puede parecer extraño en ciertos ambientes, o en ciertos sectores, pero os puedo asegurar que funciona. Yo llevo muchos años realizando reuniones de negocios en Ensosushi y os puedo asegurar que funciona, aunque también es verdad que con este tipo de restaurante exótico hay que tener cuidado porque no a todo el mundo le gusta la comida japonesa.
Debemos tener en cuenta que con este tipo de reuniones también estamos creando imagen de marca y, aunque algunos os preguntaréis qué tipo de imagen podemos crear invitando a un posible cliente a sushi, os puedo asegurar que está todo un muy estudiado, incluso la elección del restaurante.
Invitar a un cliente a un restaurante de lujo para cerrar un negocio le está diciendo muchas cosas a esa persona. La primera: que si firma contigo le vas a cuidar. La segunda: que tu empresa puede permitirse ese tipo de dispendios y, por lo tanto, funciona bien. La tercera: que eres una persona seria que va a restaurantes caros y lujosos, y eso, como imagen empresarial, es muy bueno. Y la cuarta es que en los negocios, como en la vida, también se puede disfrutar al tiempo que se obtienen beneficios.
Expertos en reputación e imagen
Pero obviamente yo no soy una experta en imagen de marca, sólo soy experta en la imagen de marca que yo quiero proyectar de mi empresa y, para conocerla y ponerla en marcha, lo mejor es contar con verdaderos profesionales en este sector como Dicendi, una agencia especializada en marketing responsable y estratégico, branding, reputación y comunicación, y gestión de clientes.
Personalmente prefiero invertir en este tipo de agencias antes que en la típica agencia de publicidad porque mientras que esta última te ofrece una campaña que, por muy bien que funcione, llega un momento en el que se acaba, las agencias consultoras como Dicendi te ofrecen campañas que mejoran tu imagen de marca frente a clientes potenciales y público en general y eso, a no ser que aparezca algo que manche tu reputación, no es algo que se desvanezca de la noche a la mañana. Si inviertes en imagen de marca y consigues mejorar tu posición en la sociedad no la perderás cuando dejes de invertir, se mantendrá contigo muchísimo tiempo.
Ahora bien, tampoco vayamos a pensar que por hacerle cuatro carantoñas a un cliente teniendo una buena imagen vaya a firmar a la primera de cambio. Obviamente nuestro trabajo ha de ser impecable o, por muy buena que sea la agencia que contratéis, no venderéis ni bocadillos (y no estoy diciendo con esto que vender bocadillos sea fácil, porque no lo es). Únicamente aunando un trabajo bien hecho y un marketing maravilloso es cómo conseguiremos crecer, expandirnos y ganar la carrera del éxito hasta donde pretendamos llegar.