Recientemente acudí a una feria del sector de los servicios online, dónde empresas que ofrecen diferentes servicios en Internet mostraban las novedades de un sector que cada vez sabe cubrir mejor las necesidades de los clientes, con soluciones integrales que de verdad tienen un valor realmente importante respecto al precio que pagas por ellos.
En este tipo de ferias es importante llamar la atención con la cartelería y maquetado del stand, algo que cuando decido ir a una feria empresarial siempre dejo en manos de Artesanias Oviedo, expertos en el diseño de expositores comerciales y publicitarios y que trabaja para convertir sus necesidades en realidades plenamente satisfactoria.
En las ferias sectoriales normalmente se va para coger ideas, ver cómo trabaja la competencia, o simplemente para mostrar tu empresa como protagonista en un stand. En este caso encontré una situación que se repetía continuamente, y que me llamó tanto la atención que decidí investigar sobre este asunto.
Lo que de verdad captó mi interés para bien fue lo motivados que estaban las personas que estaban en los stands de las empresas. En multitud de stands los propios trabajadores que realizaban los servicios eran los que te informaban sobre sus servicios o productos, generando una sensación de que el trabajador está totalmente volcado con la imagen de marca, algo que es un punto a favor a la hora de contratar con una empresa.
El Employer branding es la clave
El employer branding consiste en hacer de tu empleado tu mejor embajador de marca, fidelizarlo y atraerlo de tal manera que sea él quien decida por sí mismo recomendarte como empresa, que se encuentre cómodo con las facilidades y servicios que le aportas tú como empresa en su trabajo.
El employer branding entró en España en la década de los 80, sin embargo solo las grandes empresas intentaban mejorarlo y se daban cuenta de la importancia que realmente tiene. Actualmente con las redes sociales y la época de globalización y digitalización por la que estamos pasando, es inevitable no pasar por alto este término, que nos afecta queramos o no.
Ahora es fácil que clientes y candidatos se informen acerca de una empresa buscando opiniones de antiguos empleados o clientes, tanto a favor, como en contra. Aquí es donde juega un papel importante este employer branding.
Somos todos los que podemos leer opiniones de restaurantes, tiendas de deporte y empresas de cualquier tipo en la gran red que es internet, tanto en buscadores como en redes sociales. Y son cada vez más las empresas que se están dando cuenta de esta arma de doble filo. Por ello es importante transmitir nuestros valores en todo lo que hacemos, y hoy en día no hay mayor ventana que una red social.
En el ámbito de los recursos humanos adquiere gran importancia a la hora de atraer el talento. Si tienes intención de postular por un puesto en cualquier empresa, ya son varias las webs donde puedes ver opiniones sobre antiguos empleados, cosa que te atraerá a ella o te repelerá hacia su competencia.
Cuando un empleado está contento con su empresa se nota, y eso se expresa en un mejor ambiente de trabajo, en mayores recomendaciones de tu empresa al exterior y en un fiel embajador que atraerá el talento inevitablemente.
Sin embargo, si el employer branding fuera tan fácil de lograr, todas las empresas tendrían un employer branding desarrollado y positivo para ellas. Para esto es necesario involucrar a toda tu empresa y cuidar a tus empleados, desde el más alto ejecutivo hasta el nuevo becario que acaba de entrar a la empresa, pasando por todo el escalafón, ya que son ellos los que están en contacto directo con el público y ¿quién mejor para recomendarte que un empleado feliz?.
Cuando hablamos de empresas en las que a todos nos gustaría trabajar nos viene a la mente Google, por ejemplo, y esto es debido a su employer branding. Ellos no han invertido una gran cantidad de dinero en publicidad para que todos sepamos que sus empleados son felices por trabajar allí, han sido los propios empleados los que han difundido que su trabajo es el mejor, creándoles una imagen de marca que hubiera requerido una inversión multimillonaria para igualarla.
