La industria del vino, como casi todas las industrias del mundo actual, está llena de avances gracias a la tecnología, la cual permite dar con dispositivos y sistemas cada vez más eficientes. Uno de esos nuevos sistemas que hacen más fácil el manejo de los vinos es el sistema coravin. Si aún no lo conoces, sigue leyendo que aquí te lo contamos todo con la ayuda de Cristalfiel Grabados, expertos en el grabado y personalización de cristales.
¿De qué se trata el sistema coravin?
Se trata de un pequeño dispositivo que te permite llenar la copa de vino sin tener que descorchar la botella. Este fue inventado por el ingeniero Greg Lambrecht del Instituto Tecnológico de Massachusetts que lo que quería era dar con una forma de no tener que forzar las botellas para descorcharlas, pudiendo malograrlas, además de una forma que permitiese preservar el sobrante del contenido de la botella sin miedo a que se dañe su calidad.
El inventor paso años probando diferentes sistemas para el descorche de botellas y la preservación de su contenido luego de ser servidas las primeras copas, y puede asegurar que con este sistema, no se encontró ninguna diferencia entre las botellas a las que se les ha realizado la extracción, con otras botellas que mantienen la guarda del vino sin haberse extraído contenido.
Así, con este sistema no necesitas retirar el corcho ni la cápsula, sino que basta con colocar el dispositivo sobre la cápsula y el tapón de corcho sujeto al cuello de la botella, y proceder a accionar el sistema hidráulico que introduce una aguja en el interior de ésta. A continuación, la atmósfera interior se presuriza con argón, un gas noble con una reactividad química muy baja, es incoloro e inerte y que por lo tanto no reacciona bajo determinadas condiciones de temperatura y presión. Tras la presurización, basta con volcar la botella y accionar una palanquita de liberación, y el vino fluirá a través de la aguja insertada llenando la copa.
Finamente, solo se trata de retirar el accesorio y el corcho vuelve a sellarse, evitando el escape del vino y manteniendo sus cualidades iniciales sin que el oxígeno pueda entrar en contacto con el vino e iniciarse el proceso de degradación. De esta forma, el sistema garantiza la conservación del contenido de la botella en su lugar de almacenamiento hasta que se que quiera volver a utilizar.
Lo mejor de este sistema es que posee dos tipos de agujas diferentes para hacer la punción en la botella, las cuales se ajustarán a diferentes tipos de necesidades. Por un lado, tenemos a la aguja Añada (o Vintage) que es más delgada que la aguja estándar y está diseñada para acceder a las botellas de vino de mayor antigüedad, pensando en que estos corchos podrían haberse debilitado por el paso del tiempo.
Pero, también tenemos la aguja de escanciado rápido. Se trata de una aguja más ancha que la estándar, y permite escanciar un vaso de vino con mayor rapidez. Por ejemplo, para un evento en el que se necesite suplir una gran cantidad de copas en el menor tiempo posible, como suele suceder en los restaurantes y algunas eventos.
Gracias a estas ventajas, el sistema es ideal tanto para particulares como para empresas. Por ejemplo, particulares que consuman las botellas de su colección con lentitud, degustado de una o dos copas en cada ocasión; o para empresas que ofrezcan catas, degustaciones o servicios por copas y tengan que almacenar botellas aún con contenido. Y es que podernos servir una copa de una selección sin tener que descorchar la botella trae sus múltiples ventajas.
¿Por qué necesito un sistema coravin?
Cristafiel nos comenta algunas de las ventajas que gozarás con el uso de coravin:
- Evitará que desperdicies vino, ya que te permite servir pocas cantidades sin tener que deshacerte del reto del contenido o almacenarlo con el riesgo de que pierda su encanto antes de ser consumido en una siguiente ocasión.
- Te permite probar diferente variedad de botellas por copa, por ejemplo en una degustación o cata, o lo que muchas veces suele pasar en los restaurantes de vino por copas, sin el miedo de estar perdiendo lo que resta en la botella. Podrías tomarte una copa de Chardonnay, seguida de una de Syrah y rematar la noche con un Malbec…
- Es una forma elegante de gestionar tu selección de vinos. Puede servir los que quieras, sin tener ni si quiera que abrir la botella, y luego de vuelta su espacio en la bodega.
