El papel pintado ha vuelto para decorar las paredes de nuestros hogares y aportar sofisticación. Este elemento de decoración es perfecto para aportar alegría a las paredes, pero también para renovar la decoración de los muebles antiguos. En el mercado podemos encontrar una gran variedad de estilos, colores, estampados, diseños, etc. Muchos hogares de los años 60 optaban por los papeles pintados con estampados, pero desaparecieron de las paredes en los años 80, porque apareció una nueva tendencia: el gotelé.
El papel pintado ha regresado con nuevos estilos para crear habitaciones acogedoras y modernas. Desde Houzz informan que «el papel vuelve a experimentar un cierto revival, en una versión mucho más moderna y con una colocación muy concreta, rara vez vistiendo todas las paredes sino más bien colocado a modo de pinceladas».
Antes de colocar el papel es importante elegir una pared que tenga una buena visión frontal. Si queremos que el papel sea el protagonista, podemos colocarlo detrás del sofá o al lado de la mesa del comedor. Los diseños en tonos suaves nunca pasan de moda y son idóneos para decorar el dormitorio, porque son fáciles de decorar y aportan luminosidad.
Pero podemos optar por los papeles pintados con colores más llamativos o estampados, para decorar un baño grande. Si se trata de un espacio pequeño, lo mejor es cubrir solo una pared para destacar y no recargar la decoración. Los diseños en tonos claros y con motivos pequeños en el estampado del papel son perfectos para decorar habitaciones pequeñas, porque aportan luminosidad y sensación de amplitud.
Pero si el dormitorio o el salón es amplio, podemos elegir diseños amplios y maximalistas para evitar la excesiva repetición de los motivos. Incluso, podemos ensanchar un espacio pequeño y estrecho si optamos por un diseño de rayas horizontales, pero también podemos alargar un espacio corto con las rayas verticales. Es fundamental que el papel pintado se adapte a la decoración y al estilo del hogar, por lo que debemos escoger un color que combine con el mobiliario.
¿Cuales son las ventajas?
Los expertos en artículos de decoración para el hogar de Decoraziona home nos explican las ventajas de decorar con el papel pintado:
–Decora cualquier espacio: este elemento decorativo puede decorar el salón, dormitorio, cocina, baño, recibidor, etc.
–Es económico: el papel pintado es económico porque no exige una gran inversión ni requiere hacer obra. El papel pintado nos permite renovar la decoración de una habitación sin cambiar muebles ni realizar reformas.
–Aporta diversión: el papel pintado aporta diversión y originalidad, ya que podemos cubrir de color y estampados las paredes.
–Es lavable: podemos eliminar las manchas en este papel con una goma de borrar, o usar un trapo mojado en agua con gas muy bien escurrido. Es fundamental que frotemos muy suavemente. Pero si la mancha es de grasa, debemos usar polvos de talco, cubrir con un film plástico y deja actuar durante 24 horas.
–Cubre desperfectos: el papel pintado decora las paredes, pero también es perfecto para tapar desperfectos o grietas.
Consejos para colocar el papel pintado
Debemos colocar el papel pintado en una pared lisa para que no aparezcan burbujas, por lo que no podemos pegar este elemento decorativo en una pared con gotelé. Si queremos poner el papel pero tenemos azulejos, debemos usar un diseño autoadhesivo, ya que no necesita cola y que puede colocarse en cualquier espacio. Para que no se formen las burbujas, podemos tapar las juntas con una pasta alisadora y dejar secar. El papel de fibra de vidrio es idóneo para zonas de humedad, como la cocina y el cuarto de baño.
Consejos para decorar la cocina con el papel pintado
Es buena idea incluir el papel pintado en la cocina porque con este elemento decorativo conseguiremos transmitir personalidad y estilo. Si la cocina es moderna y tiene un estilo retro, podemos optar por un diseño en un tono pastel con cupcakes, donuts, porciones de pasteles, etc. Este diseño nos recuerda a las cafeterías americanas de los sesenta y combina a la perfección con los electrodomésticos de colores.
Pero si queremos que la cocina tenga un estilo clásico, debemos elegir un papel pintado que simula el mármol. Este modelo es muy popular, ya que muchos interioristas optan por él para aportar sofisticación y elegancia al espacio. Además, imita a la perfección este material, ya que parece que nuestras paredes son de mármol y lo mejor de todo es que no tenemos que realizar reformas. Este diseño encaja a la perfección en una cocina minimalista de líneas simples y depuradas. Lo mejor es colocar el papel en la pared principal donde se sitúa el fregadero, a modo de cenefa horizontal sobre la encimera.






